En los alrededores del 2003 la división de programación fue por obligación dividida. La WWE se encontraba con una larga cantidad de superestrellas y era necesario tener más de un show para poder dividir las glorias. El resultado fue increíble.Los primeros años de la doble compañía fueron para el recuerdo, un buen sucesor de la increíble de la “Attitude Era” pero algo pasó en el camino, de repente las historias se volvieron monótonas y las superestrellas comenzaron a desperdiciarse. Las consecuencias: fuera de los títulos pesados, todos los otros perdieron su valor, pero ninguno se vio más afectado que los títulos en pareja.
Aquí somos súper fanáticos de la luchas en pareja y es increíble ver que títulos que han sostenido grandes estrellas hayan sido desestimado de tan vil forma. Pero ahora, parece haber una luz en el camino.
La rivalidad entre Primo y Carlito con Miz y Morrison (aparentemente las únicas dos parejas que existen, por eso son los campeones de cada marca) los llevará a una pelea unificatoria del los títulos de pareja en Wrestlemania 25.
Esperemos que después de esta pelea, haya más variedad en cuanto a contrincantes por estos títulos considerando que habrá solo una pareja campeona y que sirva de ejemplo para los demás titúlos. Es hora de unificar la programación, le brindará más respiro a los escritores y los fanáticos dejaremos de ver más de lo mismo.
Con los dedos cruzados, le voy a los hermanos Colón.
